Uno de los elementos más elementales de las historias de ciencia ficción son los adornos en el cielo. Ya sea un planeta muy cercano, un juego de anillos como el de Saturno, varias lunas o hasta varios soles, con dificultad encontrarás un cielo extraterrestre que se parezca al nuestro en su simplicidad y minimalismo, con tan solo una Luna que esté lo suficientemente cerca para distinguir algún detalle a simple vista (aunque si te alejas de las ciudades, la Vía Láctea te hará pensar que estás en otro mundo).
Quizá otra muestra de esto es la emoción que sentimos ante las estrellas fugaces (que son pequeños meteoros quemándose en nuestra atmósfera), y – especialmente – los cometas. Estas bolas de hielo y roca que orbitan también nuestro sistema solar han llamado la atención de los humanos por toda la historia documentada, aunque, por supuesto, para muchas culturas representaban mensajes de los dioses sobre tragedias venideras y grandes catástrofes. El conocimiento, como suele hacerlo, ha venido sustituyendo estos mitos, y ahora podemos disfrutar del paso de estos restos de la formación del sistema solar; visitantes periódicos que nos traen noticias de la fría región exterior de nuestro hogar estelar.
Precisamente lo largo de su viaje es lo que causa que los cometas tengan su particular “cola”, que no es más que el hielo que los 
conforma derritiéndose a medida que su órbita los acerca al viento solar. El famoso cometa Halley no regresará hasta el 2061, pero aún así este 2013 podría ser un año importante para los que vemos hacia arriba. El año pasado se descubrió el cometa “ISON”, el cual por su tamaño y trayectoria, se estima podría brillar en nuestro cielo alrededor de Noviembre – incluso más que la Luna llena. Tan brillante que sería visible durante el día. Apenas va por Júpiter (bastante lejos) y ya se ve como lo aprecian en la fotografía. Claro, también podría derretirse por completo en su acercamiento al sol, y dejarnos esperando.
Por ahora, controlemos la expectativa, y mantengámonos al pendiente de la trayectoria de esta visita estelar.
Ok, no puedo… Emociónense irracionalmente: el es cometa del SIGLO.