La frase que recuerdo siempre que oigo a alguien acusar a la ciencia de ser “arrogante”:
“Los humanos pueden desear certeza absoluta; pueden aspirar a ella; pueden fingir que la tienen. Pero la historia de la ciencia – por mucho, el acceso más exitoso al conocimiento que está disponible a los seres humanos – nos enseña que lo más que podemos esperar es la mejora sucesiva en nuestro entendimiento, aprendiendo de nuestros errores, con una aproximación asintótica al universo, pero con la salvedad de que la certeza absoluta siempre nos eludirá.
Siempre estaremos envueltos en el error. A lo máximo que cada generación puede aspirar es a reducir los márgenes de error un poco, y añadir al cuerpo de información al cual aplica ese margen. El margen de error es una evaluación penetrante y visible de la confiabilidad de nuestro conocimiento.”
– Carl Sagan – El mundo y sus demonios: La ciencia como una vela en la oscuridad, p.28. –