Comenzaré por admitirlo, a manera de evitar que sea esta justa observación la que termine desmontando mi argumento: estoy plenamente consciente de mi sesgo, cuando digo que la actualidad es una de las eras más importantes en toda la historia –no solo de la especie humana, sino del universo entero.
No me cabe duda de que esta afirmación pudiese resultarles –queridos lectores– totalmente predecible, y desprovista de mérito. Es bien conocido que una de las estrategias desarrolladas por los seres humanos, para lidiar con la vastedad del cosmos, es asignar importancia artificial a nuestra breve existencia. Lo hicimos con el espacio, convencidos por milenios de que nuestra pequeña esfera azul era el centro inamovible de la creación (un error que es difícil siquiera comenzar a cuantificar); y frecuentemente sufre nuestra percepción de la escala del tiempo debido a esta misma falla. Para la gran mayoría de los humanos que han nacido, la época que les tocó vivir era una de “grandes cambios”, llena de retos complejos como la especie nunca enfrentó antes. Por motivos similares, un porcentaje significativo de personas religiosas cree que estamos cerca del “fin de los días”, según encuestas recientes. ¿Cuándo más podría ser el apocalipsis, si no es ahora, que yo estoy vivo?
Escribo con la esperanza de que mis razones parezcan un poco más racionales.
No afirmo que se trata del día de hoy, o este año específico, el que representa un periodo particularmente notable entre las eras del cosmos. Más bien, hablo de “La Tierra” en su totalidad; no como lugar, sino como momento. En este planeta, justo ahora, una de las primeras civilizaciones del universo lanza su mirada hacia las estrellas.
Efectivamente, aunque parezcamos guiados por el ego, los humanos podemos afirmar con total seguridad que estamos entre los primeros en comprender nuestro lugar en el cosmos. Puede que haya otras civilizaciones más avanzadas, viajando entre las estrellas, pero una realidad inescapable las hace irrelevantes: el universo es extremadamente joven.
Según la mejor evidencia, el universo observable se ha estado expandiendo por “tan solo” unos 13,800 millones de años. En contraste, su expectativa de vida (con estrellas brillando y planetas girando) se estima en un millón de millones de años. Impensablemente, el tiempo que hasta ahora ha pasado es apenas el 1% del que eventualmente transcurrirá. Para la mayoría de los seres conscientes que alguna vez existirán, el universo parecerá eterno y estático. Es virtud de que el universo aún es un recién nacido, que los humanos hemos podido reconstruir el enorme paso de las épocas, desde el Big Bang hasta nuestros días. Somos los precursores de la vida que aún no nace.
Visto así, resulta una suerte muy bondadosa el instante cósmico que nos ha tocado vivir. La única era en la que podemos deducir el origen del universo.
Por supuesto, en el otro extremo de la eternidad, es fácil imaginar seres alrededor de las pocas fuentes de luz que aún puedan existir (tenues enanas rojas casi tan antiguas como el universo), pensando en lo especiales que son los días que les han tocado –presenciando el verdadero apocalipsis: la muerte silenciosa de la última estrella.
De alguna forma, la historia del universo vive en las memorias de sus habitantes; quizás insignificantes en sí mismos, pero realmente trascendentales a través de sus creaciones: pequeños registros de lo que alguna vez produjeron los átomos y el vacío.
Genial el blog. Cuando empece a leer, pensé que ibas a hablar de que vivimos la mejor época para estudiar el universo, ya que como este se expande, en algún momento no se va a ver un choto. Por otro lado quiero agregar (algo que leí o escuche por ahí, también) que nuestro tiempo de vida con respecto al tiempo del universo, es como un abrir y cerrar de ojos, nada mas insignificante que eso XD.
También leí “El viaje comenzó en África”, me gusto mucho. no conocía la historia.
Saludos.
Muchas gracias Diego. Me alegra que disfrutes de las publicaciones.
Se me hace muy agradable tu prosa. Desde hace mucho tiempo lo he notado, Leyendo las publicaciones en Sobre Hombros de Gigantes y ahora esto. En verdad, eres muy bueno escribiendo APOLLOXI.
es asi tu blog es maravilloso habla de la realidad, no creo que el futuro este plasmado en un libro, ya que, a medida del tiempo se miden las cosas y las espectastivas que no provee la vida y si somos una de las especies mas especiales en la tierra de modo que muchos de nosotros no estamos consciente con la vida y no buscamos realizar un aporte a la humanidad el big bang como tal es el mas resaltable origen hasta los momentos creo plenamente que todo es de esa manera
Realmente series como las de Carl Sagan y su reciente remozamiento COSMOS son regalos invaluables que para una mente despierta amplían la conciencia mas allá de ideologías religiosas, clasistas o políticas. Somos tan inconmensurablemente pequeños al lado del universo, simples microbios de un súper organismo al que no comprendemos, sin embargo tenemos conciencia de nuestra mínima experiencia de vida y lo mas importante tenemos capacidad de ampliar nuestra conciencia mas allá de estas paredes invisibles formadas por nuestras costumbres, hábitos y el mundo material tal cual como simplemente lo vemos con toda su guerra mediática y económica, realmente somos unos microorganismos muy interesantes aunque aún se mantengan en secretos muy bien guardados nuestros verdaderos orígenes, nuestros reales procesos de evolución y nuestra real finalidad (¿Hacia dónde vamos?)
Excelente artículo, me encantó, reafirma mi convicción de que debemos vivir el ” Aquí y el ahora”
Encantador. Somos muy pequeños pero inversamente muy curiosos, lo que nos permite tratar de llegar un poco más allá, aún sabiendo lo limitados que somos individualmente. Es una paradoja que apenas podamos vivir cien años…
lo emocionante del artículo …es que pese a nuestro fugacidad, somos conscientes de ello…es la perspectiva desde sí…
Creo que en la inmensidad del Universo esta la escencia misma de la vida, de Dios, de lo inexplicable, de el sentido de nuestra existencia, y es algo que tenemos seguro, que vamos a morir, y que nunca podremos explicar. Hasta donde llega?, cuando comenzo?, quien lo hizo?, seguramente el dia que partamos de aca lo sabremos, por que hasta en eso es sabio el creador, nadie fue y volvio para contarlo.
me gusto tu articulo……todos los que amamos estas ciencias somos medianamente conscientes de nuestra finitud. no tanto algunos lideres que pareceria se creen infinitos……..Sea como sea aqui estamos,tratando de y . tarea sumamente complicada. Me agrada que estes de regreso
“Llegará una época en la que trabajo una investigación diligente y prolongada sacará a la luz cosas que hoy stán ocultas. La vida de como na sola persona, aunque estuviera toda ella dedicada al cielo, sería insuficiente para cuales nvrstigar una materia tan vasta… Por lo tanto este conocimiento sólo se podrá desarrollar a lo largo de sucesivas edades. Llegará una época en la que nuestros descendientes se asombrarán de que ignoráramos cosas que para ellos son tan claras… Muchos son los descubrimientos reservados para las épocas futuras, cuando se haya borrado el recuerdo de nosotros. Nuestro universo sería insuficiente una cosa muy limitada si no ofreciera a cada época algo que investigar… La naturaleza no revela sus misterios de una vez para siempre.”
SÉNECA, Cuestiones naturales, libro 7, siglo primero.
INTRODUCCIÓN
COSMOS
por Carl Sagan.
Estoy absolutamente de acuerdo con Séneca y Sagan. Cada verdad es revelada en su momento, y en su momento la humanidad asume tal realidad.
mento
Claro que es una de las eras más importantes, porque alcanzamos la capacidad y poder tecnológico para destruir el planeta o al menos su biosfera, o sea provocar una gran extinción en masa por nosotros mismos. Políticamente sí es el mismo círculo vicioso de siempre. Puede que el viaje de Colón sea comparable a ir a la luna, y construir las pirámides comparable al canal de Panamá, o nuestro potencial destructivo ecológico tan solo proporcional a nuestro volumen demográfico; pero, cada salto tecnológico constituye un momento relativamente importante de la historia.
muy bueno su blog, bastante ilustrativo
Muchas gracias Oliver.
O talves seamos los primeros surgidos de la casualidad de una buena suerte muy dificil aunque no realmente imposible que se vuelva a repetir, pero; llegarìa un momento històrico de tanto desarrollo humano, cientìfico y tecnològico en el cual podrìamos (es decir: podràn los humanos de guardia en dicho momento) ganar la competencia a los eventos y repetir artificialmente antes de que se vuelva a dar por si sola esa buena suerte que talves nunca se de por si sola. Con la manipulaciòn genètica de la biologìa cultivar la vida humana o empezar con la primitiva en la vastedad còsmica fèrtil realizàndose asi como un creador verdadero no un Dios inexistente. Ya està muy cerca o mas cerca que antes la clonaciòn de humanos. Se harìa realmente posible fabricar en laboratorios biològicos seres humanos con un cuerpo fìsico adaptado a las condiciones del viaje interestelar y sin la importancia de que tengan que regresar y tampoco que tengan que permanecer sin pasar la barrera en la que las comunicaciones con la base original ya no sean posibles. Estos clones tambièn serìan capaces de clonar a otros que a la vez tambièn sean capaces de clonar y asi resumir el tiempo que tendrìa que trascurrir para que una vida bacrteriana primitiva llegue al momento evolutivo del surgimiento del Homo Sapiens Sapiens.
[…] Por lo pronto, ya desde el año pasado los radiotelescopios de SETI han estado apuntado en esta dirección, para verificar la posibilidad de que existan transmisiones tecnológicas emanando de la estrella, pero hasta ahora solo han captado el ruido que sabemos domina las avenidas del cosmos. Debemos considerar que este es un sistema solar relativamente joven, con un sol que no aparenta más de unos 500 o 1000 millones de años de edad. Un infante, en comparación con nuestros 4,600 millones de años de historia. Incluso si determinamos que no pareciera haber vida actualmente en sus mundos, ¿quién puede afirmar con seguridad que no surgirá eventualmente en alguno? ¿Quién se atrevería a predecir el futuro de Trappist-1 cuando su edad alcance el otro extremo de la eternidad? […]